Encabezó el equipo tributario de la Nueva Mayoría que redactó una propuesta acordada desde la DC al PC. Participó del equipo programático de Michelle Bachelet como candidata presidencial y ahora, como presidente de la comisión de Hacienda del Senado, Ricardo Lagos Weber asumirá el liderazgo del sector para defender uno de los ejes de este gobierno que recién asume. Pero no todo se centra en la reforma tributaria para la vida política del parlamentario. Analiza el conflicto en el nombramiento de gobernadores, reclama autocrítica de La Moneda y entra a la disputa por el liderazgo del PPD: a su juicio, Jaime Quintana debe ser el nombre de consenso para seguir al mando de la colectividad.
¿Es un mal augurio la tensa semana que vivió el oficialismo con el caso de los gobernadores?
-Son 120 diputados, 38 senadores, de los cuales nosotros tenemos la mitad más uno, y de esos son escasos los que han pedido renuncias, han hablado con mucha fuerza sí, y yo lo veo, pero no veo que ahí esté en juego la estabilidad o la conducción del gobierno. Son ruidos propios de la instalación, creo que hay mucha responsabilidad de los propios involucrados en estos temas y de los partidos, y a estas alturas también del gobierno, que al final termina pagando los costos. He planteado generar una institucionalidad pública que permita ayudar a un gobierno, cualquiera que sea, a encontrar los nombres más idóneos, que permita tener un scanner más claro a objeto de evitar un costo como el que hemos visto.
¿Comparte la falta de autocrítica del gobierno, como dijo el senador DC Jorge Pizarro?
-Yo creo, conociendo al vocero, al ministro Álvaro Elizalde, que tal vez la frase que él utilizó, que fue muy al terminar una conferencia de prensa por lo demás, podría haber sido mejor; es una persona inteligente y está consciente. Este no es un gobierno soberbio, nosotros soberbia no vamos a aplicar, si hay alguien que no es soberbia es la Presidenta Michelle Bachelet, a nosotros jamás se nos va a ocurrir decir que “en 20 días hemos hecho más que otros en 20 años”.
¿Y qué responsabilidad tiene el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo?
-Estamos en un proceso de instalación, yo entiendo que todos estos temas generan un ruido, desvían la atención de temas más medulares, pero hay temas que se van a corregir. En todo caso, creo que la decisión de la Presidenta Bachelet de nombrar a Rodrigo Peiñaililo, Álvaro Elizalde y Ximena Rincón como comité político, es una tremenda señal de futuro. Es audaz, y yo voy a respaldar esa audacia, porque creo que le hace bien a la política chilena y esta misma entrevista, la vamos a tener en un año más, y vamos a hablar de Rodrigo Peñailillo de nuevo, va a ser un buen ministro del Interior. Una persona que está en plena sintonía con la Presidenta, con el equipo económico, que sabe lo que ocurre en Chile.
¿Cómo se contienen las críticas?
-Hay muchas fuerzas complicadas, pero yo soy una persona optimista, nos va a ir bien, no va a ser fácil, lo dije desde el principio, este va a ser un año duro, pero entretenido. Y vamos a sacar adelante muchas cosas. No me cabe duda que la Presidenta va a saber utilizar su capital político. Rodrigo Peñailillo tiene la inteligencia para hacer las cosas bien y lo que falta es tiempo para ir viendo cómo maduran nuestras políticas. Como coalición debemos darnos cuenta de la tremenda oportunidad que tenemos. Con la designación del equipio nadie más habló de “son los mismos de siempre”. Puede haber gente que estuvo antes, pero nadie me va a decir que es el centro, el núcleo del gobierno, aquí son puras caras nuevas, puros rostros jóvenes, y ninguno de los de siempre. Nicolás Eyzaguirre, por ejemplo, es nuevo para estos efectos prácticos. Para mí es una señal que pone ahora en los partidos la responsabilidad de poder empatar aquello.
¿Y el PPD está a la altura ?
-El PPD tiene una tremenda responsabilidad. Tiene la responsabilidad en seis ministerios que son muy importantes. Hemos sido un partido muy disciplinado, esperamos seguir siendo así. Tenemos adelante un programa que nos interpreta muchísimo y esa es la riqueza que tiene este gobierno. Esta campaña tuvo dos activos importantes: el primero, sin duda, lejos el mejor, era la candidata, pero después, que fue una candidata que estuvo en condiciones de parar un programa que hizo la diferencia. La campaña presidencial pasada fue en torno al programa de Michelle Bachelet y muchos de los apoyos que tuvimos y la oportunidad que se le dio fue en función de ese programa. Para el PPD el programa fue fundamental. No nos podemos desviar con el nombramiento de fulano, con los lotes, porque hasta ahora en lo grueso, eso es lo que tiene que ordenar. Si han habido desviaciones por cosas menores, hay que dejar eso atrás.
¿El fantasma de los mismos de siempre, de los lotes y de divisiones, surge cuando Guido Girardi sale a anticipar la salida de la gobernadora de Chiloé?
-Yo leí la noticia pero digo, claro, fue la persona que salió hablando primero de ese tema, pero entiendo que habló de eso porque lo informaron desde el sur. El intendente había llamado a la gobernadora y se había sabido la renuncia de la gobernadora. En este escenario creo que ahí sí que se está exagerando en algo. Con Guido puedo tener hartas diferencias a ratos, pero en este caso en particular como que yo no logro entender cuál fue el drama que ocurrió acá.
El PPD definirá este año su nueva mesa. ¿Qué espera?
-Nosotros esperamos que el día 12 de abril cuando sesione el consejo nacional del PPD se tome una resolución en la materia. Lo que sí creo es que las energías del PPD tienen que estar abocadas a sacar este primer año de gobierno bien. Sé que no es incompatible las elecciones internas de un partido con apoyar un gobierno, pero si me preguntan… muchos de nosotros estamos por aplazar las elecciones en un tiempo razonable y eventualmente pedirle a Jaime Quintana, si él tiene ganas, seguir a la cabeza del partido o buscar otro nombre de consenso que nos permita evitar una disputa que nos va a quitar energía.
¿Estar en el gobierno es la razón para evitar elecciones?
-Yo creo que sí. Yo entiendo que el PPD hoy día está interpretado con el programa de gobierno y que se juega mucho en este gobierno. Creo que es posible prescindir de un proceso electoral interno en pos de un ejercicio de un bien superior que es la marcha del gobierno y ahí deben estar las energías. Y como el programa nos interpreta, en eso es en lo que estamos. ¿Y quién puede conducir ese proceso? Un nombre natural es Jaime Quintana, que está de presidente. Hay que ver si está disponible para eso y si cuenta con el apoyo de todos.
¿Felipe Harboe tiene espacio para dirigir el PPD luego de las críticas internas que han surgido en su contra por los cercanos a él que llegaron al gobierno?
-Yo soy de los que prefiere mirar el vaso medio lleno. El PPD ha tenido, producto de los nombramientos, una tremenda responsabilidad en la conducción de este gobierno. Yo quiero que nos concentremos en eso.
Pero usted ha trabajado junto a Harboe en otras disputas internas.
-Sí, y no hay nada que pueda cambiar esa situación objetivamente. Hemos estado “en general desde” el mismo lado del partido y nada puede modificar eso. Y todos esos trascendidos de disputas es lo que estamos tratando de evitar varios, incluido el entrevistado. Trato de colaborar en eso no haciendo declaraciones ni generando ruidos. Si yo tengo diferencias con algún compañero de partido intento tratarlas internamente, más allá de las diferencias que puedan tener algunos. Uno tiene que auto limitarse para no generar ansiedades, resquemores, enojos, envid
ias…