Asumió esta semana como coordinador y vocero de la Nueva Mayoría, responsabilidad en la que se irán alternando en los próximos meses cada uno de los presidentes de partidos del conglomerado. En esa condición, el senador Jaime Quintana, timonel del PPD, alaba el esquema de coordinación recién convenido entre el próximo equipo político de La Moneda que encabezará Rodrigo Peñailillo y los líderes partidarios y jefes de bancada. 

“Es un esquema de trabajo y de coordinación que nos deja plenamente satisfechos porque permite que el programa se pueda llevar a la práctica. Está todo incorporado: coordinación con los presidentes de partidos, con los presidentes de ambas cámaras, una instancia de coordinación legislativa que va a liderar la ministra de la segpres con las bancadas y otra instancia donde van a participar los ministros sectoriales con los parlamentarios de las comisiones respectivas, incluso sin descartar la posibilidad de convocar a parlamentarios de oposición”, sostiene. 

-En áreas prioritarias, como educación por ejemplo ¿va a existir la posibilidad de incorporar al ministro sectorial al comité político? 

-No descartaría que eso ocurra porque las reuniones de coordinación política buscan justamente viabilizar la agenda política y el cumplimiento de las tareas planteadas en el programa, así que seguramente será muy usual ver a ministros de distintos sectores que van a estar también. 

-¿Con esto se dan por superados los cuestionamientos al hermetismo y desconsideración hacia los partidos que imperó en la designación de los primeros equipos de gobierno? 

-Sin lugar a dudas esas situaciones están superadas. La instalación del gobierno es un proceso aún en curso, donde hubo que hacer ajustes menores pero faltan otros nombramientos. Hoy vivimos un contexto político distinto a lo que fueron los gobiernos de la Concertación, otros desafíos y un ritmo distinto, tenemos una agenda ambiciosa que nos une y cohesiona y también 56 medidas para los primeros cien días que también va a requerir mucha coordinación. El diseño que el Ejecutivo nos planteó va a permitir cabalmente el cumplimiento del programa y todas las tareas de gobierno. 

“Los tiempos los pone la Presidenta”

-¿Cómo esperan incidir en decisiones como la priorización y secuencia de las iniciativas sin llegar a un cogobierno de los partidos? 

-Los partidos de la Nueva mayoría hemos planteado, y fue recogido también en este esquema propuesto por el gobierno, espacios prelegislativos. Por supuesto los tiempos los pone la Presidenta, especialmente en las reformas estructurales que son la base del programa, pero hay espacios para que en conjunto el comité político y los ministros sectoriales entreguemos opiniones sobre los ritmos y momentos. 

-¿Y cómo se van a procesar las diferencias entre los partidos de la Nueva Mayoría? ¿Las va a arbitrar el gobierno? 

-El rol del gobierno no es arbitrar sino gobernar, conducir el cumplimiento del programa. Las diferencias son propias de la democracia y de una coalición amplia y diversa; no las vamos a esconder sino a procesar y tener definiciones. No tengo duda que en los temas complejos vamos a tener capacidad de síntesis y una Nueva Mayoría ordenada porque el liderazgo de Michelle Bachelet y el programa son razón suficiente para actuar con responsabilidad. 

-¿Como afecta el funcionamiento de la Nueva Mayoría las diferencias surgidas entre la DC y el PC, como las observadas estos días sobre la situación en Venezuela? 

-Francamente no me preocupan porque esta Nueva Mayoría tiene una profunda convicción del desafío que tenemos. En el Senado fuimos capaces, con la excepción del senador Navarro que tuvo una mirada ligeramente distinta en un párrafo, de concordar cuatro puntos centrales sobre la situación de Venezuela. Estoy seguro que en la medida que sigamos trabajando juntos en instancias de coordinación como la de hoy , las diferencias propias de una coalición diversa van a quedar en un segundo plano. 

“En próximos nombramientos habrá mucha transversalidad” 

-¿Sigue pensando que entre algunos sectores de la Nueva Mayoría se ha incubado un “virus anti Peñailillo”? 

-Eso surgió al calor de situaciones complejas en el verano, cuestionamientos que el país conoció y respecto de los cuales no se tenían todos los elementos en ese momento. Cuando eso ocurre algunas veces se hacen planteamientos críticos. Pero hoy no existen, se disiparon. 

-Hay malestar en la DC porque hay áreas del Gobierno donde quedó sin representación… 

-Hay distintas maneras de mirarlo pero cuando el gobierno se despliegue y eche a andar su agenda se darán mayores equilibrios al interior de estas nominaciones, sin mirar un sector o un ministerio en función de quien es el titular y quien lo acompaña sino la expresión más amplia y diversa. Creo que con los nombramientos que habrá en los próximos días vamos a ver mucha transversalidad y se van a expresar las distintas fuerzas de la Nueva Mayoría en toda su diversidad. 

-¿Se le va a dar continuidad a algunos de los proyectos del actual gobierno aún en tramitación? 

-Probablemente algunos a medio camino que tengan algún sentido o coincidan con proyectos comprometidos en nuestro programa pero otros que sencillamente no van con los tiempos, que responden a un modelo conservador y neoliberal, como los de educación por ejemplo, van a ser archivados. Probablemente en salud o transporte hay iniciativas de mayor transversalidad que vamos a empujar para que vean la luz.