Es lamentable que la discusión pública se esté dando sobre si el PPD es de “izquierda”, “centro-izquierda”, “progresista” u otros paradigmas conceptuales.
Es indispensable ir a los contenidos reales porque el problema es que el PPD perdió definiciones y perfiles esenciales. La percepción ciudadana es que se transformó en un partido caracterizado por la ambigüedad, la falta de rumbos y la pérdida de relevancia.
Lo que debemos recuperar es la claridad y la definición de perfiles nítidos porque nos quedamos fuera de los grandes temas que se hicieron presentes desde el gran movimiento de “los pingüinos”, estudiantes por la gratuidad y la educación como un derecho. La Concertación y el PPD se sumaron tardíamente a esas demandas incorporándose solamente cuando se elaboró el programa de gobierno y se inició la campaña de la Presidenta Bachelet. Asimismo, el fin a las AFPs, la defensa decidida de nuestro recursos naturales, la descentralización y otras necesarias transformaciones de la profunda desigualdad territorial y estructural de nuestra sociedad, que en la base de la militancia están fuertemente enraizadas, han tenido una muy débil y oscilante expresión en las definiciones públicas y en el accionar de nuestras directivas.
Esa misma ambigüedad, indefinición y diversidad de posiciones se ha dado frente a la concentración de la riqueza y a la necesidad de cambios estructurales del modelo socioeconómico, respecto de lo cual hemos aportado poco con propuestas concretas para transformaciones de fondo.
Rodrigo González Torres
Diputado PPD